Durante un combate en la guerra de Vietnam, un soldado desapareció en el campo de batalla.
Su compañero y amigo decidió ir a buscarlo.
El general a cargo se opuso, ya que implicaba la misión implicaba correr grandes riesgos.

General: -«le prohibo que vaya que vaya a buscar a su compañero, ya que estará muerto o malherido. Y tengo la obligación de salvarlo a usted, para no perder otro soldado».
Soldado: – «Comprendo perfectamente lo que dice mi General, y si bien no deseo desacatarlo, voy a ir a buscar a mi amigo».
General: -«Para qué?; Vamos a perder dos hombres!»
Soldado: -«Siento que no está muerto, y confía en mí». Dicho lo cual, salió a buscar a su amigo.

Casi un día después, el soldado regresó sólo, y herido de muerte. El General estaba irritado, aunque tampoco quería retar demasiado a un soldado agonizante. Así y todo, no pudo evitarlo y le dijo:

– «Vio; ahora perderemos dos hombres.»
El soldado le contestó: -«Usted tiene razón mi General; pero cuando encontré a mi compañero, él todavía estaba vivo y me dijo: «sabía que vendrías a buscarme».

Una historia de Anthony de Mello

Artículo de Juan Tonelli: Entrega.